Sigo sin saber qué hacer. Ya hablé con la persona que debía, pero sigo igual. He hecho una lista de pros y contras, pero no me convence ni un lado ni otro.
Si tuviera otras circunstancias distintas, y la oportunidad que se me presentase no tuviese tantos riesgos otro gallo cantaría, pero claro, si fuese así ya me lo habrían quitado de las manos.
¿Es mi momento? ¿No lo es? ¿Debo arriesgar? ¿Debo esperar?
En mi entorno, unos se decantan por un lado y otros por otro, y además muy aférrimos a su opinión.
Nunca he sido de arriesgarme, de tomar decisiones precipitadas, y mucho menos que sean como ésta que afectará al resto de mi vida, porque es así. Estoy en medio de una bifurcación, se abren dos caminos y debo tirar por uno de ellos... El primero está lleno de baches y rocas, y el segundo de socabones y cambios de rasante... pero en uno "puede" haber un coche y en el otro sólo una bicicleta...
25 septiembre 2007
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